| La clase obrera conquistó mejoras luchando en la calle, organizándose y luchando dentro de cada empresa, de cada centro de trabajo, de tal modo que las condiciones establecidas en los convenios de empresa superaban holgadamente las condiciones mínimas fijadas en los convenios provinciales o en los generales sectoriales. La fórmula de la organización sindical empresa a empresa, del conflicto como vía para el avance de la clase obrera, hizo que la clase trabajadora conquistara derechos y condiciones económicas en las empresas y, de manera general, en convenios provinciales y sectoriales. Condiciones que la patronal y sus sindicatos financiados por el Estado del capital ─CCOO y UGT─ pretenden hacer desaparecer totalmente de la memoria colectiva de la clase trabajadora a golpe de ERE, de planes de salidas incentivadas, etcétera, que han servido también para que CCOO y UGT hayan sacado tajada económica por firmar despidos. La Patronal, y sus esbirros, con el mal llamado "diálogo" social ─que no es más que la venta de la clase obrera a cambio de prebendas políticas y económicas─ han ido imponiendo sistemáticamente todas las pretensiones de los empresarios:
CCOO y UGT, a la par que se hacían socios de la patronal firmando ERE y cogestionando los planes de pensiones privados con la Patronal, véase el caso de Telefónica, no han vacilado en avanzar en el desmantelamiento de la organización de los trabajadores, en liquidar los comités de empresa en tanto han asesinado a las asambleas de trabajadores, de tal modo que han arrebatado el centro de toma de decisión a la clase obrera. Antes el centro de decisión de los trabajadores se encontraba en la asamblea de trabajadores, hoy en un despacho donde la patronal impone y sus adláteres de CCOO y UGT firman lo que sus amos les ponen por delante ─véanse el XVII y el XVIII convenios TIC─ a espaldas de los trabajadores que no pintamos absolutamente nada. ¡Y así nos está yendo, cada vez somos más pobres a la par que los empresarios amasan cada vez más riqueza! El modelo que la Patronal hoy impone es el de la liquidación del convenio de empresa, el de la liquidación de la organización de los trabajadores en los centros de trabajo ─donde los empresarios imponen sus candidaturas a través de los sindicatos amarillos de CCOO y UGT con los que garantizan la liquidación de la asamblea de trabajadores y donde ponen el comité de empresa a disposición de los intereses de los dueños de las empresas─, es el de dividir y desorganizar al máximo a los trabajadores. La negociación permanente desaparece para imponer la dictadura patronal más descarnada. Se liquida completamente la negociación en las empresas y se establecen unas condiciones mínimas en los convenios sectoriales, negociados a espaldas de los trabajadores, en los que las tablas salariales se ajustan en torno al salario mínimo interprofesional. Condiciones que garantizan la explotación inmisericorde de los trabajadores, que los trabajadores paguen todo el costo de la carestía de vida y conseguir así la maximización de beneficios de la patronal. Y en todo ello participan activamente CCOO y UGT como correas de transmisión de la Patronal, como piezas fundamentales para que esta imponga su política económica y laboral. Los trabajadores debemos romper este pacto de los sepulcros de la Patronal y sus verdugos ─CCOO y UGT─, y debemos romperlo empresa a empresa, lucha a lucha por conquistar derechos, por exigir que una gran parte de lo que generamos sea para nosotros y nosotras. La Patronal hace todo lo posible porque los trabajadores no estemos organizados y no luchemos y nosotros debemos de hacer lo contrario, organizarnos al margen de los empresarios y luchar por unas condiciones de vida justas y dignas para nosotros y nuestras familias. Los trabajadores no tenemos a nadie más que a nosotros para garantizar una vida digna. Se equivocan los compañeros jóvenes pensando que saltando de una empresa a otra pueden conquistar condiciones de vida estables, y ahí están los datos económicos y sociales que muestran que la precariedad de la clase trabajadora cada vez es mayor y que cada vez menos juventud trabajadora se emancipa. La patronal está encantada con que los trabajadores salten de un sitio a otro por dos motivos: jamás consolidan derechos y se niega la organización en los centros de trabajo. Pero todavía están más equivocados los trabajadores con antigüedad y mayor edad cuando endosan a los jóvenes trabajadores la responsabilidad de "moverse". Estos trabajadores son los que más derechos han adquirido, los que tienen mejor salario y los que los empresarios más anhelan en echar, en expulsar del trabajo. Y todavía es más indigno ese argumento cuando muchos de esos trabajadores jóvenes que viven la precariedad, una precariedad que les niega el presente y el futuro y que les asfixia, son en realidad nuestros hijos. ¡Qué ejemplo y qué humanismo refleja quien esgrime tan cobarde como equivocado argumento! La clase trabajadora es una y cuando retrocedemos, retrocedemos todos los sectores de la misma, con independencia de la edad que tengamos. A los jóvenes obreros se nos está negando la vida, el futuro, y a los obreros veteranos nos están negando una vejez digna, ya sea por unas pensiones indignas y por la negación del futuro de nuestros hijos que son esos jóvenes que se incorporan a un mundo del trabajo criminal y que hemos dejado totalmente vendidos por nuestra falta de lucha. Todos sabemos lo que pasa y cuál es el camino para revertirlo. Y ello depende de nosotros y nosotras. El camino para que vivamos dignamente y para conquistar un futuro debe ser un presente de organización y de lucha. Todos y cada uno de nosotros tenemos una responsabilidad con nosotros y con los demás compañeros y compañeras. O luchamos unidos y organizados, o nos matan por separado, ¡tú decides! |
| ¡FORTALECE LA ORGANIZACIÓN DE LOS TRABAJADORES, AFÍLIATE A ASC! |
| ¡NO a los abusos laborales! |
| ¡NO a los retrocesos laborales! |
| ¡NO a la represión sindical! |
| SECCIÓN SINDICAL DE A.S.C. EN AYESA AT |
0 comentarios:
Publicar un comentario