SALARIOS, OTRO MOTIVO PARA LA ORGANIZACIÓN Y DAR UN PUÑETAZO ENCIMA DE LA MESA

El pasado mes de octubre de 2021 la carestía de vida, el IPC, ascendió hasta el 5,5%. Los precios encadenaron 8 meses consecutivos subiendo como un tiro, de tal modo que no se producía un encarecimiento de la vida tan grande desde 1992, hace prácticamente 30 años. Este hecho lo vemos claramente en la subida de la luz. En el mes de septiembre, la luz ascendió un 47% —y sigue subiendo—, lo vemos en el gas, que ha subido un 6% o cuando llenamos el depósito de gasoil, que en octubre de 2021 es 20 euros más caro que en el mismo mes de 2020. Este incremento de la vida no solo se da en la energía y en los combustibles, sino también en los alimentos que se disparan a máximos de una década, pagándose hoy un 60% más caros los aceites, un 15% más cara la leche, un 26% más cara la carne o un 41% más caro el trigo que ha encarecido, entre otras cosas algo tan elemental como el pan un 14%, si comparamos los precios con los del año 2020. Y mientras la carestía de vida está desbocada, la subida salarial pactada en los convenios colectivos por los sindicatos del régimen, CCOO y UGT, están estancados en el 1,5% o el Gobierno ha subido el Salario Mínimo 15 euros desde septiembre, o lo que es lo mismo, un 0,53% para este 2021. Sin embargo, si nos fijamos en el Sector TIC, hasta el año 2020 —que es hasta cuando se tienen se tienen datos—, según la patronal, los ingresos de las empresas no han parado: Y es que mientras en la década pasada los trabajadores, gracias al XVII Convenio de traición firmado por CCOO y UGT, nuestros salarios reales perdieron algo más del 21% de poder adquisitivo, esto es, nos empobrecimos algo más de un 21% con respecto de 31 de diciembre de 2009, la patronal española de la Consultoría, a la que pertenece AYESA, ha subido sus cifras de negocio, sus ingresos, un 24,40%. Nada mejor para ilustrar lo que ha sido el XVII Convenio TIC que las palabras de uno de los firmantes, CCOO, que cataloga ese XVII Convenio como una puñetera basura empleando las siguientes palabras para ello: CCOO y UGT con la firma del XVII Convenio TIC: Hicieron retroceder los salarios reales de los trabajadores en la pasada década más de un 21%. Situaron las condiciones de los trabajadores del Sector TIC a la cola de Europa. Según los propios firmantes del Convenio, el 42,3% de las "categorías profesionales" quedaron por debajo del Salario Mínimo Interprofesional. Y entrecomillamos lo de categorías profesionales porque esto lo vendieron CCOO y UGT en 2017 a la patronal introduciendo los grupos profesionales que, por un lado, retrasan todavía más la promoción profesional de los trabajadores y, por otro, amplían en el tiempo los salarios basura que estos dos sindicatos traidores al servicio de la patronal firmaron. Y mientras esta realidad de podredumbre y alta traición contra los trabajadores es reconocida, incluso, por uno de los firmantes del XVII Convenio TIC, como CCOO, para el presidente del comité de empresa de Sevilla, manijero mayor de la Sección Sindical de UGT en AYESA AT (porque el mandamás es RRHH) reclutado a lazo por la Dirección de RRHH en la empresa en 2009, MMR nos decía en 2017 eufórico, con la firma de dicho convenio de traición, lo siguiente: Hemos de recordar que en el caso de MMR, al menos en 2019 y justamente tras la firma del Plan de Igualdad de traición suscrito por los sindicatos amarillos CCOO y UGT en AYESA AT en marzo de 2019, lo que dice en el primer tuit ni tan siquiera fue cierto, pues en los meses de mayo, junio, julio y agosto de 2019 percibió unos emolumentos que superaban sus salarios entre un 14,36% y un 28,72% sin motivo alguno para ello. Y es que es curioso que la Sección Sindical de UGT que tiene convocada una huelga indefinida desde mayo de 2020 —esto es, casi un año y medio de huelga indefinida—, para comprobar que, lejos de ser penalizados por una huelga que no siguen ni ellos mismos, algunos de ellos también han percibido emolumentos que superaban sus salarios sin motivo para ello, tal y como hemos denunciado públicamente, por no hablar de un delegado del Comité de Empresa de Sevilla perteneciente a UGT que en el año 2020 realizó casi 300 horas extraordinarias. Por todo esto, y muchas más cosas, no podemos más que sentir vergüenza y asco cuando desde la Sección Sindical amarilla de UGT en AYESA AT os remiten un comunicado sobre el XVIII Convenio TIC y os dicen: ¿Cómo hacen en AYESA AT? Donde miran para otro lado ante el incumplimiento de la Empresa en el abuso de horas extraordinarias justificando la situación en la expresión "que va en el ADN del informático", donde miran para otro lado ante el incumplimiento de la Empresa de registrar la jornada de trabajo de los trabajadores. Y es lógico que miren para otro lado pues, como estamos denunciando públicamente, no sólo la Dirección de AYESA AT se beneficia de estas vulneraciones sino también delegados de UGT en el Comité de Empresa de AYESA AT. Y es que de aquellos polvos vienen estos lodos, y es bueno recordar, nuevamente, que la Sección Sindical de UGT en AYESA AT fue construida por el departamento de RRHH. La realidad es que, según las cuentas anuales de AYESA AT correspondientes al ejercicio 2020, y analizándolo en base a las horas de trabajo, un trabajador que tenga jornada completa —40 horas de trabajo a la semana— genera su salario semanal en 12 horas y media de trabajo, con lo que el valor que produce el trabajador en las 27 horas y media restantes de la semana se las lleva/apropia íntegramente el empresario; que traducido, significa que de las 8 horas de un día de trabajo, el trabajador genera con su trabajo su sueldo en 2 horas y media, con lo que el resto de la jornada diaria, 5 horas y media, trabaja para que AYESA AT se lleve íntegramente lo que produce. La realidad es que este año el IPC parece que va a bordear el 7% y que, todo lo que no sea subir los salarios el porcentaje que suba el IPC, será que los trabajadores sigamos perdiendo poder adquisitivo, será que los trabajadores sigamos empobreciéndonos. Todo esto acontece porque los trabajadores y las trabajadoras estamos desorganizados, divididos y desmovilizados. Hoy los sindicatos del régimen, CCOO y UGT, son apéndices del Estado de los empresarios, y junto a la patronal reciben multitud de subvenciones y liberaciones que dan la respuesta del porqué los convenios y acuerdos firmados por patronal, CCOO y UGT son tan nocivos para los/as trabajadores/as de este país, porque ellos no defienden a los trabajadores sino que garantizan la subordinación de los trabajadores a los intereses de los empresarios. Es cierto que hay que dar un puñetazo encima de la mesa, y eso pasa por echar a los sindicatos amarillos (CCOO-UGT) de los centros de trabajo, que llevan 4 décadas vendiendo a los trabajadores; eso pasa por que los trabajadores nos impliquemos en la resolución de nuestros problemas y fortalezcamos con nuestra implicación y participación la organización de los trabajadores. La única salida que tenemos los trabajadores y las trabajadoras para conquistar avances en nuestras condiciones económicas y laborales pasa por organizarnos en torno al sindicalismo de clase, en torno a un sindicato que únicamente se deba a los trabajadores y que renuncie a todo tipo de prebenda de los empresarios y su Estado. Un sindicato que exija a los trabajadores y trabajadoras que se impliquen en la labor de transformación de nuestras condiciones de vida porque únicamente los trabajadores podemos solucionar nuestros problemas, nadie vendrá a arreglarnos los problemas si no lo hacemos nosotros.

¡FORTALECE LA ORGANIZACIÓN DE LOS TRABAJADORES, AFÍLIATE A CSC! ¡NO a los abusos laborales! ¡NO a los retrocesos laborales! ¡NO a la represión sindical! SECCIÓN SINDICAL DE C.S.C. EN AYESA AT