El pasado lunes, 24 de noviembre de 2014, el Comité de Empresa envió una comunicación a toda la plantilla —comunicación que es suscrita al 100% por el sindicato Coordinadora Sindical de Clase (C.S.C.)— sobre la reunión celebrada en la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) de Sevilla, convocada por ésta misma.
Al respecto de la reunión y el comportamiento inaudito de la Inspectora de Trabajo y, en consecuencia, de la ITSS de Sevilla, la C.S.C. expresa lo siguiente:
- La sección sindical de C.S.C. -mayoritaria en AYESA AT– NO fue convocada por la Inspección de Trabajo que sí convocó al Comité de Empresa, a las secciones sindicales de CCOO y UGT y a la Dirección de AYESA AT.
- Todos los delegados de personal pertenecientes al Comité de Empresa que concurrieron a las elecciones por la candidatura de la coalición C.S.C., a excepción de dos que estaban enfermos, expresaron con claridad que C.S.C. no estaba presente en la reunión, pues no fue convocada como sección sindical, y que acudían en su condición de miembros del Comité de Empresa.
- La Inspectora de Trabajo no quiso indicar quién promovía la reunión. Hemos de señalar que esta Inspectora de Trabajo, en asuntos relacionados con el Plan de Igualdad, se ha reunido con anterioridad con la Dirección de la Empresa, reuniones de cuyo contenido no tenemos constancia.
- El Comité de Empresa enumeró una serie de vulneraciones por parte de la Empresa de los derechos de los trabajadores:
- En materia de Igualdad: despido de mujeres de baja maternal, de embarazadas, despidos y traslados forzosos de trabajadores con reducción de jornada.
- Hostigamiento a la plantilla.
- Represión sindical.
- Injerencia en los asuntos de los trabajadores.
- Quebrantamiento de la buena fe, principio que según la legislación debe regir las relaciones laborales.
- El Comité de Empresa describió todas las ocasiones en las que, desde 2010, ha pretendido negociar el Plan de Igualdad y cómo la Empresa se ha negado en rotundo.
Todas estas cuestiones a la Inspectora de Trabajo le daban igual, tal y como expresó explícitamente.
Si todo estos hechos ya de por sí son graves, en el transcurso de la reunión quedó comprobado que la primera portavoz y defensora de los intereses de AYESA AT fue la propia Inspectora de Trabajo. Y es que la inspectora:
- Trató de forzar al Comité de Empresa para que variara su posición, no escatimando en faltarle al respeto al Comité y, en consecuencia, al conjunto de los Trabajadores.
- Una vez el Comité se mantuvo firme en su planteamiento de negociar siempre y cuando la Dirección de AYESA AT restituya el principio de buena fe, la igualdad entre las partes, deshaga los atropellos contra los trabajadores (despidos, traslados, etcétera) y que muestre una preocupación real por la igualdad, que ha despreciado y pisoteado durante todos estos años, la Inspectora de Trabajo convirtió la reunión en un confesionario donde las secciones sindicales de CCOO y UGT debían redimirse y retratarse ante la Empresa y ante la Inspectora de Trabajo, con el objeto de cuestionar la decisión del Comité de Empresa, de fraccionar y, sobre todo, de explorar la fórmula jurídica, apoyada y promovida por la Inspección de Trabajo, para que los objetivos de la Empresa sean salvaguardados. Con esta actitud, la Inspectora de Trabajo se convertía en una vulgar asesora jurídica de AYESA AT.
Desde la Coordinadora Sindical de Clase apoyamos sin fisuras la posición adoptada mayoritariamente por el Comité de Empresa, en la que debemos incluir dentro de esa mayoría a varios delegados del Comité de Empresa que concurrieron bajo la candidatura de UGT. Y, como no puede ser de otra manera, la C.S.C. apoya y reconoce al Comité de Empresa como único órgano que legal y legítimamente tiene la capacidad de negociar en nombre de la plantilla porque la representa a toda ella.
A la Dirección de AYESA AT no le importan las condiciones de los trabajadores así como la igualdad entre hombres y mujeres, como ha demostrado durante todo este tiempo, arremetiendo contra ellas. La Dirección tiene interés en sacar su plan de igualdad —bajo la forma de supuesto acuerdo con los trabajadores a través de sus representantes— para acceder a distintivos, subvenciones y certificaciones de igualdad que le favorezcan, o cuanto menos no le penalicen, en concursos y dar una imagen de sensibilidad al respecto de la igualdad así como de talante negociador con los trabajadores. Es evidente que algunos que se dicen representantes de los trabajadores, pero que anteponen sus intereses particulares a los de la clase trabajadora y a los de la plantilla, no tienen escrúpulos en jugar ese papel miserable para conquistar pequeñas prebendas particulares.
Lo que es ya inaudito es que la Inspectora de Trabajo entre también en este juego para que AYESA AT consiga su objetivo. Desde la Coordinadora Sindical de Clase consideramos vergonzoso el papel jugado por la Inspectora de Trabajo y mucho nos tememos que tratará de remover Roma con Santiago para darle una llave a la Empresa, vía requerimiento por el cual trate de obviar al Comité de Empresa, tratando de sustituir a éste mediante un enjuague con las Secciones Sindicales. Desde aquí queremos dejarle ya claro a la Inspectora de Trabajo que, al igual que no nos convocó a la reunión, se ahorre de contar con este sindicato para hacer esas maniobras o juego sucio, contrarias a los derechos de los trabajadores. Dentro del ADN del sindicalismo de clase está la honestidad, el respeto a los órganos de la clase trabajadora y la defensa de sus intereses y no tenemos más principio ni más obligación que defenderlos pues, de lo contrario, nos podrían llamar traidores y corruptos. Pues corrupción no es solamente venderse para obtener un beneficio propio, sino también es trocar o cambiar la función de una cosa a otra distinta de lo que debe ser, como, por ejemplo, convertir una Inspección de Trabajo en una gestoría empresarial.
COORDINADORA SINDICAL DE CLASE (C.S.C.)