Dice la empresa que "tenemos la capacidad para adaptarnos a entornos cambiantes", pero, a la hora de la verdad y leyendo las cartas de despidos objetivos, se constata que la política de AYESA es actuar como una ETT y encajona a los trabajadores y las trabajadoras en proyectos y en tecnologías. Cada carta de despido objetivo es la constatación de cuánto miente la Empresa y también de lo inútil que es el convenio del sector para la plantilla en materia de clasificación profesional. Dice la empresa que "nos importa cada persona", pero, por un lado, aplica una política de depuración de sangre para rebajar la masa salarial y, por otro, aplica una política de no reconocimiento de la categoría de los trabajadores y las trabajadoras para incrementar los beneficios empresariales a costa de no reconocer el trabajo de la plantilla y, por tanto, no remunerarlo como tal. Si de verdad le importaran las personas a AYESA, ni despediría, ni establecería unas políticas donde, por ejemplo, tiene a compañeras y compañeros como 3-D-I haciendo labores de análisis, o lo que es lo mismo, pagándoles casi 7.500 euros menos al año. Un trabajador 3-D-I, sin trienios, por ejemplo, percibe un salario anual de 19.077,68 euros brutos al año. Si cobra en 14 pagas –como AYESA impuso a la mayoría de los trabajadores que han accedido a la empresa en 2024–, quiere decir que cada mes gana 1.362,69 euros brutos. Si a la empresa verdaderamente le importaran los trabajadores, se preguntaría: ¿cómo puede vivir un trabajador o una trabajadora cobrando dicho salario al mes? La realidad es que hay muchos compañeros y compañeras que no llegan a final de mes, que necesitan buscar apoyo económico de sus familiares para poder sortear el mes. Los trabajadores y las trabajadoras trabajamos para vivir dignamente de nuestro trabajo no para vivir con estrecheces. Los beneficios de la empresa son las estrecheces de una gran parte de la plantilla. Menos propaganda empresarial y más justicia para los trabajadores y para las trabajadoras de ATECH ADVANCED SOLUTIONS. Y eso pasa, para empezar, por el reconocimiento del trabajo que realizamos, eso quiere decir que se reconozca a los trabajadores y a las trabajadoras en sus nóminas las funciones que realmente desempeñan. Desde ASC consideramos que es esencial la consecución de un convenio de empresa que contenga un sistema de clasificación profesional verdaderamente claro, sin ambigüedades, que sirva para que se reconozca el trabajo realizado en la nómina y no como pasa hoy. Un convenio que sirva al conjunto de los trabajadores para avanzar y para poder vivir dignamente del trabajo que realizamos. Y para conseguirlo es necesario el concurso de todos y todas, pues únicamente podemos avanzar individualmente si conseguimos avanzar primeramente como colectivo y, para ello, tenemos que luchar de manera unitaria y organizada por la consecución de un convenio colectivo que articule dicho avance colectivo que implicará un avance para cada trabajadora o trabajador. ¡O luchamos juntos o nos matan por separado! ¡Tú decides! |
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